Junto a su esposa Lis Cuesta y un reducido séquito oficial, el mandatario cubano Miguel Díaz-Canel Bermúdez asistió en La Habana al concierto ofrecido por el grupo Gente de Zona y la cantante italiana Laura Pausini.
Bajo un torrencial aguacero, el mandatario cubano permaneció junto a miles de fanáticos que se dieron cita en el parqueo de la Ciudad Deportiva de la capital, para cantar y bailar junto a los reguetoneros cubanos más conocidos internacionalmente.Díaz-Canel, que tiene dos hijos músicos, y en sus años de juventud fue un seguidor de John Lennon y la banda inglesa de rock The Beatles, ha expresado que, “los adversarios del proceso cubano pretenden utilizar la cultura como plataforma de restauración capitalista. Por eso insisten en la banalización, en la vulgarización de la cultura”.
La presencia del mandatario da una sensación extraña, pero no incomoda, y le sigue poniendo una cuota de modernidad al Gobierno comunista de la isla.
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